jueves, 28 de diciembre de 2006

Nuestra Historia


El atardecer cae sobre tu suelo
La luna brilla en el horizonte
y tu SOMBRA se pierde
en la eternidad de mis lamentos...
Cuando sientes que el mundo cae... levántate!!!!
Las palabras se las lleva el viento
Las acciones quedan grabadas en el corazón...
Y nuestra historia permanecerá por siempre.

miércoles, 27 de diciembre de 2006

Cuento de Amor


Cuenta la leyenda que una vez se reunieron en la Tierra, todos los sentimientos y cualidades de los hombres. Cuando el Aburrimiento había bostezado por tercera vez, la Locura, como siempre tan loca, les propuso: - "¿Jugamos al escondite?". La Intriga levantó la cara intrigada y la Curiosidad sin poder contenerse, preguntó: - "¿El escondite? ¿Y cómo es eso?". - "Es un juego"- explicó la Locura-, "en el que yo me tapo la cara y comienzo a contar desde uno hasta un millón, mientras ustedes se esconden y, cuando yo haya terminado de contar, el primero de ustedes al que encuentre, ocupará mi lugar para continuar el juego". El Entusiasmo se halló secundado por la Euforia. La Alegría dio tantos saltos que terminó por convencer a la Duda, e incluso a la Apatía, a la que nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar. La Verdad prefirió no esconderse, ¿para qué?, si al final siempre le hallaban y la Soberbia opinó que era un juego muy tonto (en el fondo, lo que le molestaba era que la idea no había sido suya) y la Cobardía prefirió no arriesgarse... Uno, dos, tres... comenzó a contar la Locura. La primera en esconderse fue la Pereza, que, como siempre, se dejó caer tras la primera piedra del camino. La Fe subió al cielo, y la Envidia se escondió tras la sombra del Triunfo, que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto. La Generosidad casi no alcanzaba a esconderse; cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos: ¿Qué sí un lago cristalino?... ¡Ay, ideal para la Belleza! ¿Qué sí la rendija de un árbol?... ¡Perfecto para la Timidez! ¿Qué sí el vuelo de una mariposa?... ¡Lo mejor para la Voluptuosidad! ¿Qué sí una ráfaga de viento?... ¡Magnífico para la Libertad! Así que terminó por ocultarse en un rayito de Sol. El Egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo... eso sí, sólo para él. La Mentira se escondió en el fondo de los océanos (¡mentira!, en realidad se escondió detrás del arco iris), y la Pasión y el Deseo en el centro de los volcanes, y el Olvido... ¡se me olvidó donde se escondió!... pero no es lo importante. Cuando la Locura contaba 999999, el Amor aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que divisó un rosal y enternecido, decidió esconderse entre sus flores. - "¡Un millón!"-, contó la Locura y comenzó a buscar. La primera en aparecer fue la Pereza, sólo a tres pasos de la piedra. Después escuchó a la Fe, discutiendo con Dios en el cielo sobre zoología. A la Pasión y al Deseo los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró a la Envidia, y claro, pudo deducir donde estaba el Triunfo. Al Egoísmo no tuvo ni que buscarlo; él solito salió desesperado de su escondite que había resultado ser un nido de avispas. De tanto caminar sintió sed y al acercarse al lago, descubrió a la Belleza. Y con la Duda resultó más fácil todavía, pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún en que lado esconderse. Así fue encontrando a todos. El Talento entre la hierba fresca, la Angustia en una oscura cueva, la Mentira detrás del arco iris... (¡mentira, sí ella estaba en el fondo del océano!), y hasta el Olvido, al que ya se le había olvidado que estaba jugando al escondite. Pero sólo el Amor no aparecía por ningún sitio. La Locura buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo del planeta, en la cima de las montañas y, cuando estaba apunto de darse por vencida, la Envidia le dijo que el Amor estaba tras aquel rosal... Y tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto, un doloroso grito se escuchó. Las espinas habían herido en los ojos al Amor, la Locura no sabía que hacer para disculparse; lloró, rogó, imploró, pidió perdón, y hasta prometió ser su lazarillo. Desde entonces, desde que por primera vez se jugó al escondite en la Tierra, el Amor es ciego y la Locura siempre, siempre, le acompaña.

domingo, 24 de diciembre de 2006

Decide hacer felices a tus hijos.


Si quieres que tus hijos sean felices, decide....
Decide recibir a tu hijo como un huésped de honor que estará temporalmente en tu hogar.
Decide darle a tu hijo un regalo magnífico un padre que ama a su madre y una madre que ama a su padre.
Decide escuchar a tu hijo todos los días.
Decide amar a tu hijo sin condiciones ni reservas.
Decide que nunca identificarás a tus hijos por sus fracasos o errores.
Decide darle a tu hijo un sentido de responsabilidad hacia si mismo, hacia los demás y hacia las cosas.
Decide disculpar a tu hijo de una manera justa y sin rencores.
Decide disculparte con tus hijos cuando te equivoques.
Decide que nunca temerás a tus hijos, o te sentirás intimidada por ellos o sus preguntas.
Decide guiar a tu hijo para que sea independiente.
Decide no pedir a tu hijo que cumpla con los sueños y esperanzas que alguna vez tuviste para ti.
Decide no permitir que tus preocupaciones sociales determinen como tratas a tu hijo.
Decide darle a tu hijo el principio básico de fe para su vida sea los suficientemente grande para que lo sostenga en cualquier situación.

viernes, 15 de diciembre de 2006

A la sombra de la luna


Me he caído y no puedo levantarme.
He perdido las piernas en aquéllas mañanas de paseos, de termómetros flamígeros bajo la axila de nuestro amor.
He olvidado cómo tocar la canela que el invierno esculpe en tu cuerpo, al mojar de aire las gotas de vida que tiramos por negros callejones a la sombra de la luna.
Me he caído y no quiero levantarme.
No me hablas, pero te escucho, no me miras pero tus ojos son mis ojos, no levanto la cabeza de los pies y me pliego entre tus manos,y todavía no sé lo que soy, pero soy tuyo, aunque sorba gotitas de café de tus labios, me inmole en tu corazón y cante en el aire que respiras.
Me he caído y no quiero despertarme.
No me dejes abrir más los ojos.

Estas lineas están basadas en un sueño, yo, caigo y del que primeramente no consigo despertarme, pero deambulando por la trama voy descubriendo a una mujer la cual desconoce mi existencia, y seguidamente siento el deseo y la atracción de permanecer en esa historia aunque sólo sea mientras duerma, por ello pido no abrir más los ojos, por lo bonito que puede llegar a ser el soñar dormido.

sábado, 2 de diciembre de 2006

CARTA


Esta carta se encuentra dirigida a todas aquellas madres, que por alguna u otra razón a lo largo de sus vidas han perdido a un hijo…Esta idea surge, como una forma de sanación personal, de crecimiento y desarrollo personal o simplemente a raíz del dolor experimentado por una persona muy ligada a mí, que desde la muerte de sus niños no ha logrado cerrar un ciclo, lo cual le ha impedido avanzar en la vida…A mis queridos y siempre recordados niños:Hijitos míos, hoy es un día muy especial para mi y creo que de alguna manera también para ustedes, porque de alguna u otra forma, hoy nos vamos a despedir y vamos a pasar a una etapa mucho mas avanzada, en donde ni el tiempo, ni el espacio nos podrá separar, en donde Ustedes mis amados hijos formaran parte de mi historia, de mi vida, mi pasado y porque no decirlo de mi presente…porque siempre estarán a mi lado, siempre en mi corazón, mi cabeza, mis pensamientos y todo lo que haga, pero ya nunca mas con tristeza o con angustia, sino con alegría y esperanza… esperanza de que algún día nos volvamos a encontrar y entre muchos angelitos, muchos niñitos me sonrían y yo los reconozca entre muchos otros niños y bebes.Se que en una fecha como hoy, salieron de mi vida tan fugaz como entraron en ella, que durante todo este año y estos mese me he culpado de su partida, de su muerte, de no ser capaz como mujer de protegerlos, de hacerlos permanecer en mi vientre y de traerlos a este mundo; en donde tal vez muchas cosas los esperaban… al menos mucho amor y cariño de mi parte, pero creo que la vida por alguna u otra razón nos coloca pruebas para crecer y avanzar, para aprender a vivir y eso hijitos míos es lo que me faltaba y aun me falta … simplemente vivir, aceptarme, reconocerme, pararme de frente al mundo y decir simplemente aquí estoy, esto soy y así soy, para que de alguna manera ustedes mis amados niños se sientan orgullosos de mi. La verdad, es que creo que ésta es la carta más difícil que me ha tocado escribir en muchos años, simplemente, porque se trata de ustedes, porque el dolor que su partida me causó es una pena que creo hasta ahora no he podido superar y de la cual día a día me trato de levantar y es que su recuerdo siempre me persigue, en todo lo que hago, en todo lo que toco, lo que pienso y lo que siento… y es que como dicen por ahí un hijo nunca muere y aunque nunca vi sus rostros con el solo hecho de escuchar el sonido de sus corazones eso basto para saber que eran parte de mí y que por siempre formarían parte de mi historia pasase lo que pasase….Mis niños, hay tantas cosas que me gustaría decirles, cosas que salen desde el fondo de mi corazón, de mi alma destrozada en mil pedazos desde el mismo día en que supe que tarde o temprano tendrían que partir, porque yo los esperaba, creo que siempre los espere, y justo en el momento de su llegada tuve que comenzar a despedirme, aun cuando albergaba las locas esperanzas de que se quedaran a mi lado para siempre , pero hoy, en que ha pasado el tiempo y he recobrado mis fuerzas sé que todo pasa por algo y fue en esos precisos momentos en que aprendí en que a pesar de estar completamente sola era mucho más fuerte de lo que todos pensaban, que podía salir adelante y que por siempre los iba a amar y serian mi pequeño gran secreto, mis esperanzas, mis angelitos de la guarda, mis lucecitas, mis compañías…Por eso, hoy quería cerrar el ciclo como muchos otros que debo cerrar en mi vida, sanarme de muchas cosas, curar mis heridas, limpiarme y perdonar todo el daño y la pena que me han causado algunas personas y situaciones a lo largo de mi historia, para poder avanzar y rehacer mi vida… aun cuando ustedes mis queridos hijos solo han sido una lucecita en mi camino, ustedes no tienen nada de que avergonzarse o arrepentirse o sentirse mal, solo deben volar y descansar… porque su madre ahora ya es libre, y lo que es mas importante con esta cartita y este proceso los deja libre a ustedes, para que vuelen muy lejos a un lugar seguro donde muchos otros niños iguales a ustedes juegan tranquilos en dulces pastos, rodeados de árboles y arroyuelos, esperando reencontrarse algún día con sus padres… y no se preocupen porque yo los reconoceré, son carne de mi carne y eso no se olvida. Estoy en paz con ustedes, estoy es paz conmigo misma y lo que es mas importante estoy en paz con su padre, él no tiene la culpa de nada, algún día mirara hacia atrás y de seguro los recordara con amor y cariño como yo lo hago ahora y si no es así, será la propia vida, la que le recuerde que en una ciudad muy lejana, una mujer que lo esperaba y lo quería mucho, alguna vez albergó en su vientre por largos meses a dos hermosos niños… así es que no se preocupen, ustedes siempre estarán en mi y de alguna manera en él. En esta historia ya no hay culpables, en esta historia ya no hay pena, ni dolor, solo amor y recuerdos felices, esperanzas de que el día de mañana ustedes mis angelitos de la guarda me envíen a unos niños tan hermosos como ustedes, que no los remplacen claro esta, porque nunca los podría remplazar, sino que los acompañen desde la distancia. Los quiero, los quiero mucho, creo que siempre los voy a querer, pero de una manera especial, sin culpas, sin reproches y sin penas, sin temor, sin miedos y lo que es mas importante ya sin dolor… son parte de mi historia y jamás los voy a negar… siempre serán mis niñitos del alma, mis hijos del corazón, del alma y del espíritu…Cada día, cada noche los recordaré, miraré el cielo y las dos estrellas más cercanas y brillantes que observe a la distancia sabré que son ustedes, los saludare desde mi ventana, les haré una seña y desde mi corazón les diré que estoy bien y que cada día crezco y avanzo un poco más… me acepto, me quiero y me entiendo.Ojala ustedes, me sonrían de la misma forma, acelerando el latido de mi corazón, brillando con más fuerza, pensando para mis adentros que ustedes son mis hijos y ahora descansan en paz…. Ahora nada les debo… ahora ustedes nada me deben a mi, ahora… estamos en paz. Los amo y nunca los voy a olvidar. Pueden volar, que desde este momento su madre comienza de nuevo a nacer, porque ya basta de torturarse, de seguro a ustedes no les gusta verme así, destrozada, destruida, cansada y agotada de la vida… ahora es su madre la que se arto de todo esto, la que toma las riendas de su vida y decide renacer de las cenizas, ponerse de pie y dar lentamente pacitos, pero con la convicción y la esperanza de que cada día que pasa es un avance y que nunca, pero nunca más me volveré a equivocar o a desviar del camino, porque ya estoy encontrando mi esencia, mis raíces, mi ser y lo que siempre fui…No crean hijos míos que la partida ha sido fácil, de hecho, escribir esta carta y despedirme de ustedes ha sido lo más difícil de todo, siempre me negaba a aceptar la realidad, vivía soñando en que todo sería como antes, pero no puedo añorar lo que jamás sucedió, ustedes ya no están y bueno… lo debo aceptar… nada será como antes, no importa cuanto desee las cosas o cuanto le pida a Dios que las cosas cambien, la vida continua y yo sigo aquí esperando milagros y eso no sucederá…. Bueno amados hijos… descansen mucho, porque su madre por primera vez en muchos meses dormirá tranquila y soñará con ustedes. Los quiero y los llevaré siempre en mi corazón y estoy segura que su padre hace lo mismo. Cariños y abrazos a la distancia. Su madre por siempre y para siempre